El ayuno es un tiempo para recordar la conexión espiritual que tenemos con nuestro cuerpo, no solamente le damos un descanso a los procesos digestivos, sino que también permitimos que nuestras emociones se desintoxiquen.

En la vida moderna con nuestros estilos de vida y el medio ambiente, los cuerpos se cargan de toxinas desde pesticidas de comida no orgánica, químicos que usamos en nuestra piel como los productos de belleza e higiene, metales pesados que ingerimos del agua e incluso antibióticos de los alimentos que comemos. Los cuales son sustancias que son dañinas para la salud y nos dan la sensación de sentirnos con fatiga e interfieren con nuestro sistema inmune induciendo a un envejecimiento prematuro que se refleja en enfermedades crónico degenerativas como artritis, diabetes, colitis, Alzheimer, etc.

​

Qué decir del estrés cotidiano y nuestras situaciones emocionales y mentales que nos aquejan en el día a día, dándonos una desconexión con nosotros mismos y nuestro ambiente.

Dejándonos en un estado de rutina que nos aleja del vivir en el aquí y el ahora. 

​

Por eso hemos creado, un protocolo de ayuno terapéutico que brinda múltiples resultados.